Entradas

Mostrando entradas de marzo 17, 2024

Quisiera

 Quisiera hacerme primavera y llenar tu casa de flores, dejando luz cuando haya días que se tapen tus ojos. El árbol que te abrace y te lleve hacia la fortaleza de tus raíces. Quisiera ser el arco iris de tu locura donde bailes con tu música inventada. La cueva para cobijarte y el paraguas donde sientas la lluvia. Quisiera ser el bolígrafo con el que escribes tu historia. La brisa que te refresque del soplo de calor, La canción que tarareas en la ducha. Quisiera ser los zapatos con los que exploras  caminos, el susurro en el silencio, el eco con el que deja tu voz. Tu amuleto, tu golpe de suerte. Unas manos en tus bolsillos. Parte de tu respiración. Un nuevo día se dibuja en el reloj. Suelto mis manos al viento, volando pájaros atrapados en el deseo de querer. Los veo expandirse en un horizonte, llueven  las semillas que un día planté. 

Horizontes

 Siempre voy de camino, a veces corriendo,  a veces parando entre las rocas para mirar lo que hay debajo Entre los árboles me cobijo mientras el sol trae el picor del calor de las horas puntas y entre la arena dibujo una palabra de bienvenida en un idioma inventado. Mientras rasco la cáscara de una naranja, miro al horizonte donde los azules siguen en los pasos blancos de las nubles hasta un infinito imaginario, y el sol tapiza de luz a los colores más oscuros. En ese punto me quedo, con el aire suave del verano; y mis dedos afrutados en los bolsillos. Realizo las preguntas que he guardado por tanto tiempo;  porque sé que sólo aquel horizonte me traerá un día algunas de las respuestas.

Alegría

 Que no te quiten la alegría Las ganas de girar las manos al cielo De sentir la tierra en los pies Que no te quiten la belleza, los colores, la complicidad Que no te quiten el cielo azul  El río fluyendo en agua Los abrazos consentidos La magia del latido del corazón Que no te quiten la posibilidad de respirar a pulmón lleno Que no te pinten el mundo de gris Mírate en un espejo y observa el milagro del tiempo. Abre los ojos con los parpados caídos Vívete vivo en la emoción de cada día  Sal a buscar la risa del absurdo, cuando la seriedad abrume tu piel Cuando en el cansancio y brutalidad de las noticias surjan ranuras en la piel Observa el movimiento entre el día y la noche La pureza de la mirada del nacido La bondad de lo ajeno  Que no te coloren el mundo como un lugar peligroso Si es él, que nos cobija en sus estrellas No  pierdas la fe en el amor humano  Cuando todo quiera pintarse de temor Que no se apague tu sonrisa en el suspiro del aire